¡Buenas mis amores! Llegó octubre y con él la temporada de disfraces y mucha diversión y hoy quiero que hablemos del cine, de villanos a íconos, ¿cuantxs por aquí? A lo largo de la historia, los personajes queer en el cine han sido representados de manera estereotipada, en su mayoría con roles de villanos o figuras marginales. ¡Esto ha sido una realidad!
En un medio donde la visibilidad es poder, esta tendencia creó una concepción de que lo queer era sinónimo de peligro o perversidad.
Sin embargo, figuras que antes eran mostradas como villanas ahora son vistas bajo una nueva luz, como íconos de resistencia y liberación; a lo largo del tiempo, se ha producido una transformación en la representación de los personajes queer en el cine.
Vamos con un poquito de historia, por qué borracha pero buena muchacha e inteligente. Muchos años atrás la represión de una identidad sexual “no aceptada” se traducía en una amenaza que debía ser callada, alimentando prejuicios homofóbicos. Los directores recurrían a los estereotipos de personajes afeminados o hipersexuales para crear una sensación de incomodidad o peligro en la audiencia. Esto contribuyó a reforzar la idea de que lo queer era perverso y dañino. Pero no mis amores, no es así, y lo saben.
Esto reafirmaba la idea de que la identidad queer debía mantenerse en las sombras, algo vergonzoso y desviado que no tenía lugar en la narrativa de las historias. Nos estaban pordebajeando,¡lo pueden creer!
El Dr. Frank-N-Furter, interpretado por Tim Curry, es un extraterrestre transgresor que mezcla lo masculino y lo femenino de manera fluida y juguetona, ¡como tu anfitriona favorita! Aunque su carácter es excéntrico y provoca el caos, no es el verdadero antagonista de la película. Frank-N-Furter representa una liberación de las normas de género y sexualidad, un mensaje que resonó profundamente en las audiencias queer de la época.
Frank-N-Furter invita a los personajes y espectadores a explorar su deseo sin culpa y a abrazar la diversidad en todas sus formas. Este personaje se transforma en un símbolo de empoderamiento queer. En lugar de ser una amenaza, es el impulsor de la liberación sexual y personal para quienes lo rodean. Y abriendo camino a la comunidad LGBTIQ+ en el cine.
¡Es verdad! Los tiempos han cambiado, pero hay historia y no la podemos olvidar. A medida que la cultura evoluciona, el cine también lo ha hecho. La nueva forma de narrar a los personajes queer en el cine, nos ha permitido seguir viendo más y más historias queer contadas desde perspectivas auténticas. Al desafiar los estereotipos negativos y celebrar la diversidad, el cine puede ser una plataforma para la inclusión, la empatía y la reivindicación de las identidades queer.
Lo que comenzó con personajes marginalizados ahora está generando una ola de visibilidad positiva y empoderamiento. Así que no tengas miedo de salir del closet y ser tú, libre y empoderadx. Para iniciar ven por un rumbita en Bar Chiquita, ¡No te voy a decepcionar!