¡Qué más pues, bebéeees! ¡Cómo los he pensado! Con tanta rezadera en el ambiente, se apoderó de mí el espíritu de la santa rumba bendita así que, hoy les traigo los 10 mandamientos de Bar Chiquita, no negociables, pa que pasemos bien chimba. Y es que no hay nada mejor que darle hasta abajo en la mejor rumba de Medellín, con la tranquilidad que solo nuestro bar gay de confianza nos puede ofrecer.
¡Mirá pues! Poné cuidado y luego no me digás que no sabías:
1) Parcharás con responsabilidad y pasarás rico porque así debe ser.
2) No se tolerarán comportamientos violentos o agresivos. ¡Aquí vinimos fue a pasarla rico!
3) El ingreso es solo para mayores de edad. 18 en Medallo y 21 en Bogotá. No queremos líos, mijo.
4) No ingresarás, venderás o consumirás sustancias psicoactivas, porque esto es una rumba limpia, mor.
5) No recibirás tragos ni cositas raras de gente que ni conocés.
6) No meterás bebidas, termos ni armas; aquí se entra solo con las ganas de fiesta.
7) Si ya estás muy prendo, volvé otro día. No podrás pasar en estado de alicoramiento, mor.
8) Cuidarás de las instalaciones que están hechas con el corazón, pa’ vos.
9) No bajarás la guardia ni darás papaya a los indelicados. ¡El autocuidado, mor!
10) Y lo más importante: cuidarás de tus amix; juntxs llegaron, juntxs se van. No es que vas a dejar a los parceros tirados. ¡Nada que ver!
En Bar Chiquita, parchamos con responsabilidad y pasamos bueno porque así debe ser. ¡Sin peleas ni mala energía, pueeees! El que venga con ganas de tirarse en la rumba, que se quede en la casa viendo novelas. Aquí, en el mejor bar gay en Medellín y Bogotá, las reglas son claras. Sollátela lo que querás y respetá a todo el mundo. ¡Y ojo baby, que solo mayores de edad pueden entrar! No queremos a la mamá llamando a las 2 de la mañana preguntando por la niña. ¡Lo peooor!
Otra cosa que aprendí en las tantas noches de rumba en Bar Chiquita, es que uno no puede confiar en todo el mundo. Aquí no se recibe nada de extraños, ni se traen cositas raras ¿me oyen? Tampoco metás chorro, termos ni nada raro. ¡Dejá la chichipatada, marica! Mejor dicho, vení solo con las ganas de darlo todo y con bastante platica pa que gastés. Además, dejá el guaro pa tomártelo aquí en Chiquita y conmigo. Si llegás muy prendo, ¡pa la casa es que te devuelvo! Ayudanos a cuidarte, mooor.
Lo más chimba de todo es que Bar Chiquita además de ser la mejor discoteca gay de la ciudad, es el sitio con los shows drag más top, el ambiente más pro y los cocteles más ricos. Como buenos creyentes de la rumba y sus poderes, aquí venimos a descualquierarnos pero, eso sí, este parche que es de todos ¡hay que cuidarlo! ¡dale amor!
¡Pilas pues, con los mandamientos que hoy te doy! Ellos son la receta pa que Bar Chiquita siga siendo el club más seguro de la comunidad LGTBIQ+, donde venimos a ser felices y a parchar sin miedo. Así que ya sabés, ponete la 10, respetá mis mandamientos y disfrutá de la mejor rumba gay en Medellín y Bogotá.
No siendo más, mis amores, ¡nos vemos en Chiquita!
